Testo yonqui by Paul B. Preciado

Testo yonqui by Paul B. Preciado

autor:Paul B. Preciado [Paul B. Preciado]
La lengua: spa
Format: epub
ISBN: 9788433941299
editor: Editorial Anagrama
publicado: 2024-09-28T00:00:00+00:00


Pornificación del trabajo

No necesito recordarte, mientras sujetas este libro entre las manos, que el sexo no tiene su ámbito ni en el cuerpo individual, ni en la esfera privada, ni en el espacio doméstico. Tu sexo no está situado en tu cuerpo individual, ni en tu esfera privada, ni en tu espacio doméstico. Y aunque así fuera, ni el cuerpo individual, ni la llamada esfera privada, ni el espacio doméstico escapan a la regulación política. El sexo, la excitación, la demanda de erección y eyaculación existen en el centro mismo de la esfera pública y de la producción capitalista. De hecho, en la economía farmacopornista la situación puede definirse de este modo: el trabajo es sexo. Labor sexus est . En la ciudad ciberextensa farmacopornográfica, el proceso material de trabajo se puede describir como un conjunto de tracciones sexuales, de instintos psicosomáticos, de elevaciones hormonales; como una puesta en marcha de conexiones sinápticas y una emisión de excreciones químicas. El objeto del trabajo en la sociedad farmacopornográfica no es satisfacer, sino excitar: poner en marcha el aparato somático que regula el ciclo excitación-frustración-excitación. Trabajamos en la pornofábrica: una industria tecnosomática cuyos carburantes son el esperma, la sangre, la orina, la adrenalina, la testosterona, la insulina, la silicona, los psicoestimulantes, los estrógenos, pero también los signos digitalizables y transmisibles a gran velocidad, el dígito, el texto, el sonido, la imagen, etc. A este proceso de devenir sexo del trabajo contemporáneo, o viceversa, de devenir trabajo del sexo contemporáneo, lo llamaremos «pornificación del trabajo».

Así, para comprender la verdad de la praxis del trabajo posfordista habrá que estudiar con detalle tres ámbitos hasta ahora considerados como periféricos o marginales con respecto a los ciclos capitalistas de producción y consumo:

1. La producción, el tráfico y el consumo de drogas (legales o ilegales) . Entiendo aquí por droga no solo toda sustancia química de origen natural o sintético que afecta específicamente a las funciones del sistema nervioso central del organismo vivo, sino, en un sentido más amplio, cualquier sustancia (legal o ilegal) biológicamente activa, capaz de modificar el metabolismo de las células sobre las que hace efecto. Algunos de los principios de gubernamentalidad de flujos psicotrópicos han sido esbozados en el capítulo «Farmacopoder».

2. La producción, la circulación y el consumo de los materiales audiovisuales pornográficos . Entiendo aquí por pornográfico todo material audiovisual sexualmente activo, capaz de modificar la sensibilidad y la producción hormonal y de poner en marcha ciclos de excitación-frustración y de producción de placer psicosomático.

3. El trabajo sexual . La mercantilización de la potentia gaudendi de un cuerpo en un contrato (más o menos formal) de servicio sexual.

El poder de estas tres plataformas –drogas, materiales audiovisuales pornográficos y servicios sexuales– de producción de capital reside en su capacidad para funcionar como prótesis de la subjetividad. Se dibuja así una toxicopornología económica general en la que fluyen órganos, píldoras, ciudades, conexiones comunicantes, imágenes, textos, pajas, litros de silicona, compuestos químicos, dólares...

Los teóricos de esta nueva concepción del trabajo como excitación ya no serán



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.